Veracruz en crisis: elecciones municipales marcadas por violencia y nepotismo, Morena en el centro de la controversia

Las elecciones para renovar 212 alcaldías en Veracruz están marcadas por una alarmante ola de violencia, rupturas internas y nepotismo, con Morena como uno de los principales actores que enfrenta cuestionamientos severos. En un contexto donde el crimen organizado busca infiltrarse en los gobiernos locales, el partido en el poder no ha podido garantizar ni la seguridad ni la transparencia del proceso electoral.

La elección del 1 de junio, histórica por la ausencia de alianzas tradicionales entre PRI y PAN y la ruptura de Morena con el Partido del Trabajo, ha estado empañada por graves incidentes. Dos candidatos de Morena fueron asesinados en los municipios de Coxquihui y Texistepec, este último escenario de una masacre con cinco muertos y varios heridos, lo que evidencia la incapacidad del gobierno para proteger a sus propios militantes y ciudadanos.

Además, la contienda está salpicada por acusaciones de nepotismo dentro de Morena, donde se han detectado nombramientos y candidaturas otorgadas a familiares y allegados, debilitando aún más la confianza ciudadana en un partido que prometió cambio pero que parece repetir los mismos viejos vicios.

Mientras la violencia y la corrupción crecen, Veracruz enfrenta una crisis política profunda, con Morena al centro de la tormenta, incapaz de garantizar un proceso electoral libre, seguro y justo.