¡Otro atropello de Morena! Avanza el tren ligero en Campeche sin estudios ni consultar a nadie
El gobierno de Campeche ejecuta a toda prisa un tren ligero sin sustento técnico, sin estudios públicos y sin haber consultado a la población. Lo que debería ser una obra de movilidad se ha convertido en un símbolo de improvisación, opacidad y autoritarismo morenista. Activistas y ciudadanos denuncian que se trata de un capricho político más, mientras los verdaderos problemas del estado siguen sin solución.
NACIONALES
7/8/20252 min read


El gobierno de Layda Sansores impone un proyecto millonario a espaldas del pueblo. No hay sustento técnico, no hay consulta, pero sí hay prisa y opacidad.
Campeche vive otro episodio de abuso y autoritarismo: el polémico proyecto del tren ligero que impulsa el gobierno de Morena avanza sin freno, sin pies ni cabeza y sin el más mínimo respeto por la ciudadanía. Lejos de ser una obra bien planeada, se trata de un capricho político envuelto en propaganda, que ya ha generado preocupación, indignación y sospechas por todos lados.
¿Transporte moderno o monumento a la improvisación?
Fuentes cercanas al proyecto han revelado lo que muchos temían: no hay sustento técnico claro, no existen estudios públicos serios y, peor aún, no se ha realizado consulta ciudadana alguna. Lo que Morena llama “progreso” en realidad huele a imposición, simulación y negocio disfrazado.
¿Cuánto va a costar? ¿Quién lo aprobó? ¿Dónde están los planos? ¿Quién supervisa la obra? Silencio total. Y es que, como en tantas decisiones de este gobierno, la transparencia brilla por su ausencia.
Layda Sansores impone, el pueblo obedece… o eso cree
Al más puro estilo autoritario, Layda Sansores ha hecho oídos sordos a las voces ciudadanas que exigen claridad, estudios de impacto ambiental, viabilidad financiera y participación comunitaria. En lugar de eso, el gobierno campechano parece decidido a aplanar el camino con propaganda, opacidad y soberbia.
“Esto no es un tren. Es una locomotora de ocurrencias y corrupción”, acusan activistas y urbanistas locales, quienes han alertado del peligro que representa ejecutar un proyecto de esta magnitud sin bases sólidas.
Campeche no pidió este tren… pero lo pagará caro
Mientras la ciudadanía lidia con problemas urgentes como la inseguridad, el desempleo y la falta de servicios públicos de calidad, el gobierno morenista desvía recursos millonarios a un proyecto cuyo verdadero destino nadie parece conocer. ¿Quién se beneficia? ¿A qué intereses responde este tren?
Lo que sí es claro es que Campeche no lo pidió, no lo aprobó y no lo discutió. Y sin embargo, ya lo está pagando.
Una vez más, Morena pasa por encima del pueblo
Este nuevo atropello no es un caso aislado. Forma parte de un patrón ya conocido: decisiones unilaterales, obras improvisadas, cero transparencia y un profundo desprecio por la voz ciudadana. Morena gobierna como si Campeche fuera un feudo, no una democracia.
El tren ligero se ha vuelto un símbolo del estilo de gobierno de Layda Sansores: ruidoso, costoso, mal planeado y sin rumbo.
¿Hasta cuándo seguirá el pueblo pagando los caprichos del poder? ¿Hasta cuándo permitirán que Morena imponga obras faraónicas sin sustento mientras los problemas reales siguen sin resolverse?
La ciudadanía exige respuestas. Y sobre todo, exige respeto.