Esteban Villegas entrega el poder local a Morena y abandona a su coalición

NACIONALES

7/11/20251 min read

Durango, Dgo – En una apuesta política de alto riesgo y aún mayor pragmatismo, Esteban Villegas Villarreal decidió respaldar con todo a Betzabé Martínez Arango, la única alcaldesa morenista electa en Durango. Su victoria –auspiciada por Morena‑PVEM‑PT– no habría sido posible sin el respaldo logístico, mediático y financiero que provenía del aparato estatal vinculado a Villegas. Así, la oposición se convierte en su gran apuesta para perpetuarse.

Mientras los alcaldes del frente PRI‑PAN reciben capacitación y presupuesto, Betzabé es presentada como la figura central de esta nueva etapa política. El mensaje es: no importa el color, sino lealtad al sistema de Villegas. Sin embargo, esta “coordinación plural” eclipsa la desilusión que sienten integrantes del PAN y PRI, que vieron a su candidato pasar del apoyo total a un desplazamiento evidente.

Betzabé ofrece un discurso fresco: justicia social, mejora urbana, oportunidades para juventud y equidad. Promesas que, en apariencia, contrastan con un sistema tradicional. Pero detrás del “rostro moreno” se encuentra la misma estrategia priísta de control territorial, uso de estructuras clientelares y presupuesto público. Tal como humillantes pactos entre gobernantes y partidos serviles durante décadas, esta jugada vuelve a vestir de cambio lo que es continuidad.

Al final, Villegas está usando a Betzabé como su garante política. Pagó el precio de traicionar a sus aliados originales, ignoró estructuras aliadas, y adoptó la narrativa de una nueva “era guinda” mientras sigue siendo el eje principal del tablero político en Durango.