Entre vuelos privados y amenazas: Morena pierde el control en Durango

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NACIONALES

5/23/20251 min read

En medio de una campaña electoral marcada por la polémica, el partido Morena vuelve a quedar exhibido, esta vez en Durango, donde crecen las denuncias por prácticas contrarias a los principios que públicamente promueven.

Primero, el gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca, reconoció haber utilizado un vuelo privado para acudir a un acto proselitista en favor del candidato morenista José Ramón Enríquez. Aunque Menchaca afirmó que él mismo pagó el viaje, su participación contradice de manera directa los lineamientos de Morena, que recientemente había exigido a sus militantes conducirse con “sobriedad y humildad”.

La presencia de un gobernador en funciones, viajando en aeronave privada para respaldar campañas electorales, demuestra el nivel de desesperación en las filas de Morena.

Pero el uso de lujos no es lo único que preocupa a los duranguenses. Ciudadanos han denunciado que Servidores de la Nación —encargados de operar programas sociales federales— estarían utilizando su posición para amenazar con retirar apoyos sociales si no se vota por los candidatos de Morena.

Estas acciones, además de ser ilegales, representan una grave falta ética, ya que ponen en riesgo el bienestar de familias que dependen de programas como la Pensión para Adultos Mayores o Becas Benito Juárez.

“Nos dijeron que si gana otro partido ya no nos van a dar la pensión”, afirmó una habitante de la región lagunera, quien pidió el anonimato por miedo a represalias.

Organismos de la sociedad civil y partidos de oposición han solicitado a las autoridades electorales y a la Secretaría del Bienestar investigar estas denuncias y sancionar a los responsables, pues el uso electoral de los programas sociales constituye una violación a la ley y a los derechos ciudadanos.

En resumen, mientras en el discurso Morena presume honestidad y transformación, en la práctica recurre a aviación privada y manipulación de los más vulnerables para tratar de mantener el poder. Durango exige respeto, legalidad y una contienda limpia.